UNA TABLILLA RARA

TABLILLA PERSA Murió Jerjes, refieren las antiguas crónicas, asesinado por el ambicioso capitán de la guardia real, Artabano. En el relato de Justino, Artabano no pudo asirse del cetro, pues cayó bajo el puñal de Artajerjes, a quien pretendía victimar también poco después de haber dado muerte al rey. Pero, otros afirman que reinó nueve meses después de su crimen. Podemos deducir con cierta aproximación la fecha de la muerte de Jerjes I. Diodoro de Sicilia dice en su libro 12 que Jerjes II, sucesor del Longimano, tuvo un año de reinado (Ctesias le asigna sólo cuarenta y cinco días), correspondiente al año 4 de la Olimpíada 88 (425-424 a. C.). Por otra parte, Ctesias «in Persicis» calcula en cuarenta y dos años el reinado de Artajerjes Longimano, mientras el Canon de Tolomeo, que no se preocupa ni de Jerjes II ni de Sogdiano, le da cuarenta y tres años. Si tomamos como base el año 425-424, que, sin duda, pertenece a Jerjes II y a Sogdiano, y que para el Canon de Tolomeo debe ser el 43 de Artajerjes, el primer año de este último, muerto su padre, será el 467-466 a. C.Tal resultado no se compagina fácilmente con los años atribuidos por el Canon de Tolomeo a los antecesores de Artajerjes. A Jerjes I le da veintiún años, y a Darío treinta y seis, lo cual reportaría al 524-523 el principio de Darío, siendo así que los años de Darío corren después de la usurpación del Mago Pseudo-Smerdis (522-521), completando el rey, según lo atestigua Herodoto, treinta y seis años de reinado antes de morir (521-485). No quedan ya más años para Jerjes I más que los años 485-467, diga lo que quiera el cómputo alejandrino. Casi todos los exégetas modernos, sin fijarse en las inexactitudes del Canon de Tolomeo, señalan como primer año de Artajerjes el 465-464, y por lo mismo colocan el XX de dicho rey en 445. Olvidan que existe, para este rey, como para muchos otros, a más del cálculo formalista que coloca los reyes en series sucesivas, comenzando el uno cuando muere el anterior. Otro cálculo menos que refleja mejor las realidades de la vida: el cálculo que parte de una asociación al trono o captación del poder Salta a la vista que este otro cómputo pudo darse en nuestro caso. Los años de Ciro se cuentan de tres o cuatro modos diversos: como rey de Ansán, como  rey de Persia, como rey de Babilonia; con Darío Medo, solo. Los años de Cambises se sujetan a dos cómputos: el uno (Herodoto, Canon de Tolomeo), desde la muerte de Ciro, 529; el otro (Ctesias, Clemente de Alejandría), desde la toma de Babilonia, 538. La práctica de las asociaciones al trono estuvo hasta cierto punto de moda y sancionada por la ley entre los persas, como lo refiere Herodoto: «Al marchar para una expedición militar debe ser designado el príncipe Rey, según la ley de los Persas» (lib. VII, cap. 2); por lo cual, Darío, listo a marchar contra el Egipto, «nombró rey a Jerjes» (lib. VII, c. 3), padre de nuestro Artajerjes Circunstancias de diverso género explicaban tales asociaciones: consolidación de la dinastía contra intrigas y revueltas, mayor esplendor de la dinastía reinante, enfermedad, vejez o ausencia del rey, etc...  Tomemos como caso la decrepitud de Jerjes en la segunda mitad de su reinado, se impone que haya compartido el poder con otro. Y se comprende perfectamente que Artajerjes, aun contra la voluntad de su padre, haya tomado las riendas del gobierno, y se haya mostrado ante la nación como Rey titular y efectivo. Que tal haya sido la realidad histórica sé desprende de algunos hechos de la historia griega, que están en íntima relación con la Persia; son narrados por escritores antiguos y fechados del tiempo de Artajerjes veamos este raro caso.En una de diez tablillas cuneiformes, la BE VIII 1, Núm. 127 contiene una inscripción concerniente a Darío II, la cual afirma que su ascenso al trono persa,  fue en el  año 51 de Artajerjes.  Las nueve tablillas restantes dicen que Darío ascendió en el ‘año 41 de Artajerjes. Además, hay  otra tablilla, la BM 65494, que se fecha al mes VI, día 4,  año 50 de Artajerjes I. Con el Núm. 82-8-18, 5480 del Museo Británico en el catálogo CBT VII. Muchas autoridades  en historia aqueménida, opinan que el año  50 y  51 en estas dos tablillas cuneiformes se trata de un error de escriba, dicen que  el número 40 y  41  puede ser un error para 50 y 51, tanto es así que los eruditos ni siquiera se molestan en considerarla. Figura 2:  La tablilla CBM 12803, publicada por A. T. Clay como la Núm. 127 en BE VIII 1, P1. 57 La tablilla BE VIII 1, Núm. 127:  (= ‘CBM 12803’) Es una tablilla de Nippur fechada al ‘mes Addaru [mes XII]; día 20, año 51, el año de ascenso de Darío,el Rey de las Tierras. Los eruditos que no quieren favorecer la profecía de las 70 semanas del el libro de Daniel, alegan que este es un error fácil decometer, porque según ellos, "las figuras que indica el año” antes que terminen numerales con cuatro cuñas en ángulos con espacios muy estrechos.  El digito “40” en el “41” es representado por cuatro cuñas en ángulos con espacios muy estrechos, en la configuración ligeramente diferente. Tomaría un simple resbalón del estilete para agregarle una cuña adicional.  ¿Podría  ser posible un error de esta clase? Indudablemente no, porque los escribas utilizaban arcilla fresca, lo cual bastaba con agregarle un poco de arcilla, cubrir el error, y  copiar de nuevo el número. Hablemos de otras fuentes históricas la fecha de 475 AC. Para el año de ascenso de Artagerges. De dónde Diodoro, Cicerón, y Eusebio sacaron su fecha?  Esta cuestión fue discutida por Alden A. En 1975. Mosshammer afirma que todos, los tres autores obtuvieron la fecha directa o indirectamente, de Apolodoro de Atenas  del siglo 2 a.C. Sólo fragmentos de su Crónica permanecen hasta hoy. Esta fecha para la huida de Temístocles a Persa, del 472/71 a.C., no aparece hasta varios siglos después de Diodoro y Cicerón, en un manuscrito latino de la Crónica de Eusebio de Cesárea (quien vivió cerca del 265-340 d.C.). Ninguna copia de la obra griega original de Eusebio ha sobrevivido, pero una traducción en el armenio todavía subsiste, y también una traducción al latín por Hieronymus  (cerca del 340-420 d.C).  En en el manuscrito de Bodleian de la traducción de Hieronymus dice que la huida de Temístocles a Persia se fecha en la Olimpiada 77, 1 (472/71 a.C.) y su muerte por aparente suicidio en la Olimpiada 78, 2 (467/66 a.C.). Eusebio (Chronic.), con mayor fundamento, coloca la fuga de Temístocles al Asia, y, por ende, las cartas de Temistocles al recién entronizado Artajerjes, en el año cuarto de la Olimpíada 76, año, que corre desde verano de 473 al verano de 472. Por consiguiente, el primer año de Artajerjes Longimano debe ser fijado en 473-472, desde el mes de Tischri (septiembre-octubre) que corresponde al primer mes de el año persa. La legitimidad de esta fecha lo confirma otro suceso histórico sacado de la vida de Cimón, hijo de Milcíades. Entre las hazañas de ese héroe, se cuenta como la más gloriosa de la doble victoria naval y terrestre reportada el mismo día en las bocas del Eurimedonte. Además,  Diodoro de Sicilia, (lib. IX) asegura que tal hecho sucedió en el año 3 de la Olimpíada 77, que corresponde al año 470-469 a. C., y por otra parte, Eusebio dice en su crónica que ese era el año 4 de Artagerges. Estas son solo algunas de las muchas fuentes históricas que muestran que el primer año de Artagerges fue del 473-472. Un minucioso estudio comparativo de los sincronismos greco-persas llevaría, lejos de toda duda, al robustecimiento de esa conclusión. Sin embargo, creemos tener ya el derecho de afirmar que la cronología realista y concreta del reinado de Artajerjes; cronología primitiva y usada en vida del rey, única cronología que conocieron Esdras y Nehemías, cuyas Memorias fueron escritas en vida de ese mismo rey, es, como acabamos de exponerlo, la que arranca de Tischri  (septiembre y octubre) dei 473. El año XX de Artajerjes está comprendido entre Tischri 454 y Tischri 453. Nehemías recibe informes sobre la triste situación de la ciudad santa en Casleu, (noviembre-diciembre) de 454, y en Nisán (marzo-abril) del mismo año, XX de Artajerjes, marzo-abril de 453; obtiene del rey, en favor de Jerusalén arruinada, la regia palabra querida por Dios, punto de partida de las 70 Semanas de la Profecía daniélica.